Por Ignacio Koblischek. Todos los derechos reservados.

3.-El Sistema Heráldico al siglo XXI. 

No será hasta principios del siglo XXI cuando el panorama comience a cambiar. En primer lugar, la difusión por internet permite estudiar más afondo la materia y contrastar opiniones. De esta forma, se ha ido concienciando a los internautas de la posibilidad de "adoptar un escudo de armas" siempre que no coincida con el de otra persona y esté organizado conforme a los usos heráldicos. 

El Sistema Heráldico se enfrenta a grandes retos en el siglo XXI, principalmente al de su utilidad. Como pudimos comprobar al estudiar los orígenes del Sistema Heráldico, una de las consecuencias de su origen fue el fraccionamiento del poder y la necesidad de exteriorizarlo mediante símbolos o emblemas de poder. Pues bien, esa característica sigue aún vigente, pero sólo en la Heráldica municipal. Las demarcaciones territoriales son las que actualmente tienen el poder de aplicar leyes, recaudar tributos y proteger al ciudadano. Por este motivo, la Heráldica municipal es la que mejor ha sobrevivido en todas las épocas. 

La Heráldica gentilicia, por el contrario, se enfrenta ahora al problema de su utilidad. Realmente, el uso personal de un escudo de armas no tiene sentido, no hay apenas lugares donde exponerlo para que lo observen terceras personas. Si lo hacemos, nos exponemos a las críticas de la sociedad en general. Parece que sólo se aceptan aquellos que son antiguos, que las creaciones ex novo no tienen valor. 

Pues bien, todo ello ha cambiado. El Sistema Heráldico se vuelve a adaptarse, en esta ocasión lo que cambia es el mensaje a transmitir y, como consecuencia, el diseño.

Aprovechando la ocasión de poder organizar un escudo de nueva creación, el titular buscará qué transmitir y elaborará un mensaje con sentido, un escudo inteligente. De esta forma, los nuevos escudos transmiten, entre otros aspectos, valores personales, aspectos familiares, profesionales, aficiones, etc. 

Los armoriales se convierten en "armoriales digitales" y todos los países cuentan con heraldistas que se dedican a registrar los escudos de armas que van diseñando. Quizás, en las próximas generaciones, lo que se transmita sea el mensaje, pero con distintas figuras. Sin duda, una visión enriquecedora del Sistema Heráldico. 

Por otro lado, surge lo que llamamos Heráldica de fantasía o carnavalesca, que consiste en utilizar ornamentos exteriores de dignidades que no corresponden al titular. 

Por último, me gustaría proponer la posibilidad de crear una Heráldica accesible, en este caso para ciegos. Se trata de aprovechar el rayado heráldico de Pietrasanta para grabarlo en superficies como barro o arcilla, haciendo posible que el tacto diferencie colores, superficies y figuras.

3.1.-Conclusión. 

Como conclusión destacaría que todavía está pendiente de configurar la articulación del Sistema Heráldico. Es decir, como se relacionan los tres elementos que lo forman: superficies, colores y figuras. Este será el contenido del próximo curso "Diseño Heráldico" o "Articulación del Sistema Heráldico".


Notas